Si hay afasia sensitiva o de Wernicke:
Si el problema el paciente es una afasia sensorial, lo que ocurre en el cerebro de la persona es algo parecido a esto: la persona escucha palabras, pero en vez de entenderlas bien, las entiende mal. Cuando quiere hablar, la persona recupera bien la palabra, pero dice otras o mezcla todos los fonemas y pronuncia palabras que no existen.
Como su problema no es de articulación, la persona habla de forma fluida, sin pausas, pero usa lo que se denomina "jerga fonémica" o "parafasias" o "neologismos", es decir, emite una ensalada de palabras que no existen en el idioma que los dos hablantes comparten (ej. la persona dice "Las telerías son entumes perifásicos".
No hay que buscar alguna regla de entendimiento porque no suele haberla. La producción de fonemas es al azar y pueden querer repetir el mismo concepto y hacerlo de forma diferente (ej. para decir "ordenador" dicen "portentosa" y después "ortentando").
Dependiendo de la gravedad, la persona no es consciente de lo que le ocurre, porque cree que está entendiendo bien lo que oye y que al hablar está diciendo lo que quiere decir, y por tanto le sorprende que los demás no respondan como él esperaría que hicieran. No obstante, otros pacientes sí son conscientes de su problema pero no pueden evitar hablar de otra manera.
¿Qué debemos hacer?
Por encima de todo, ya que el problema se encuentra en el lenguaje, encontrar otra manera de expresión que no lo requiera, como por ejemplo los dibujos, es muy útil. Fijarse en los gestos y en el tono de voz nos ayudará, y si seguimos sin entender, no nos pongamos nerviosos, simplemente intentemos continuar la conversación de manera amable imaginando que nosotros estuviéramos en su situación y nos apeteciese mucho hablar. No hay nada peor que dejar abandonada la conversación, ya que la persona siente que no hay interés en su opinión ni en interaccionar con ella.